Cubierta libro |
Antonio Sánchez Sánchez y Juan José Antúnez Muñoz de la Peña
(JAM-BÉJAR) son los autores de La Tarjeta
postal ilustrada en Béjar II, publicada por el Archivo Fotográfico y
Documental de Béjar. Se nos presentan un total de doscientas cincuenta y
ocho tarjetas postales de temática bejarana distribuidas en ciento noventa y dos
páginas. Cada una de las imágenes va acompañada de un texto explicativo a pie
de fotografía en el que se recoge, siempre que es posible: el autor de la
instantánea, su fecha exacta o probable, una pequeña descripción de ubicación o
puntos de referencia que permiten localizarla y, muchas veces, una mención a
qué edificios o parajes ocupan en la actualidad los espacios retratados.
El libro viene precedido de una presentación de Antonio Sánchez
y un prólogo de Yolanda Izard, además de una introducción de Juan José Antúnez con
un recorrido por la historia de la tarjeta postal. Se estructura en nueve
capítulos en los que los autores agrupan por temáticas, postales de la ciudad
textil: Panorámicas, Urbanas, El Parque, El río y la cuenca industrial, La
Sierra, Alrededores, El Castañar y El Bosque. Completa la publicación con una
miscelánea de imágenes (cap. 8) y un apéndice en el que están incluidas varias
tarjetas que no pudieron ver la luz, por diversas razones, en La Tarjeta postal ilustrada I.
Finalmente, un glosario de cartofilia facilita al lector el seguimiento del
texto.
Antonio Sánchez, miembro destacado del Centro de Estudios
Bejaranos y Juan José Antúnez, ambos coleccionistas y estudiosos del universo
gráfico de la Villa Ducal, desde hace varias décadas, cierran, por el momento,
una larga trayectoria recopiladora e investigadora que se ha traducido en una
amplia bibliografía con la publicación de numerosos artículos, en revistas tanto
científicas como divulgativas y varios libros centrados en la fotografía y en
la postal bejarana, siendo esta La Tarjeta postal II, como acabamos de apuntar, la
segunda parte de un volumen anterior publicado en 2017.
La obra, maquetada por el propio Antonio Sánchez, presenta
una cuidadísima edición que convierte el libro en un ejemplar atractivo ya
desde la misma portada (su autoría es de Óscar Rivadeneyra) por la calidad
material y el detalle cuidado de su tirada.
El libro es, por su propia naturaleza, un compendio pensado primariamente
para ser disfrutado con la vista que, sin duda, seducirá a bejaranos y
salmantinos, permitiéndoles en muchos casos viajar a su propio pasado inmediato.
Pero más allá de ello, la publicación debe ser valorada asimismo por su indudable
interés histórico. Sánchez y Antúnez actúan con una metodología cercana a la de
los arqueólogos, pues su quehacer se orienta, primero, a la recuperación de
restos materiales, gráficos en este caso, tras una búsqueda casi siempre
intensa y en absoluto fácil; a su divulgación; y, sobre todo, finalmente, a su
interpretación. En este sentido, como alguna vez se ha escrito, las postales
que los autores recuperan son objetos, en principio, intrascendentes y
efímeros, pero una vez analizadas por ellos, pasan a ser piezas de excepcional
valor histórico en tanto que, muy bien contextualizadas, permiten la
reconstrucción del ayer bejarano, al ser testimonio no solo de la vida
cotidiana de la ciudad o las modas de sus gentes, sino de su propia estructura
en aspectos tales como el desarrollo urbano y urbanístico, su médula textil y su
auge y decadencia, la vida material, los contrastes sociales y modos de vida de
burguesía y obreros, o los rostros de algunos de sus ciudadanos ilustres o
populares, por citar solo algunas posibilidades. De este modo, las imágenes
presentadas en el texto tienen un valor no solo meramente iconográfico o
descriptivo, sino que asumen asimismo un punto de vista iconológico o
interpretativo, que confiere al perceptivo un valor añadido como documento
histórico.
La esmerada publicación de Antonio Sánchez y Juan José
Antúnez, en definitiva, es no solo una agradabilísima y excelente recopilación
de láminas de por sí muy atractivas desde la nostalgia o incluso la mera
curiosidad del lector bejarano, sino que, con su libro, los autores consiguen también
actuar como auténticos notarios de la evolución de la villa ducal y, por tanto,
como guardianes de su memoria colectiva. El libro, además, contribuye a
domocratizar la difusión de la historia de Béjar, poniéndola al alcance de sus
habitantes a través de sus ojos.
Es por ello que La Tarjeta
postal ilustrada de Béjar II es, hoy, junto a su predecesor, el vol. I del
mismo título, un referente insoslayable para todo aquel que se acerque a la ciudad
de Béjar, tanto desde el sentimiento como ciudadano como desde el interés
histórico del investigador. En definitiva, Sánchez y Antúnez nos ofrecen un
libro imprescindible que cualquier salmantino debe tener en su biblioteca.
Emiliano Zarza Sánchez
Centro de Estudios Bejaranos